Lautaro sumó un nuevo partido y tachó un nuevo casillero en la búsqueda del récord, pero, a cuenta gotas, ingresando a falta de un minuto. La gente pidió por su ingreso en la semana y se lo recordó a Pellegrino en la Fortaleza. Sin embargo, el DT sólo lo hizo entrar cuando terminaba el juego.

«¡Laucha! Dejá de calentar. Hace 9 meses que te hace correr y nunca te pone!». El hincha, indignado, a pocos metros de Lautaro Acosta y Mauricio Pellegrino. Con el partido en juego. No podía creer que el ídolo sea una moneda corriente de aplausos y saludos todos los fin de semana, pero de la línea de juego hacia afuera. Y la verdad, que errado no estaba. Ni está. El DT, elegantemente, no cuenta con el 7 del Grana. Ni antes, ni mucho menos ahora. Sólo está para eso, para ser coreado por la gente que tanto lo quiere. Minutos, suma a cuenta gotas. En el 2025, el futbolista de 37 años acumula sólo 7 ingresos, y 29 minutos en cancha. Pero de la boca para afuera, todo marcha bien. ¿O no?
Ésta historia ya se vivió, y en corto plazo. Con diferentes finales. Diego Valeri, por ejemplo. De los máximos referentes de los últimos 20 años. Volvió de los Estados Unidos para disfrutar sus últimos cartuchos con la camiseta de sus amores. Pero Almirón no lo tenía en sus planes. Se fue por la puerta de atrás, cansado del ninguneo. Luego vino la despedida de José Sand. mismo escenario, borrado por Kudelka, mimado por Zielinski (ponele…). Pero con fiesta de despedida, como se merecía. Y ahora le toca el turno a Lautaro, quien anunció su retiro para fin de año. Con el récord al alcance de su mano. Pero que avanza lentamente. Sufriendo, llegará a pasar a Maxi Velázquez para ser el jugador con más presencias en la historia del club. ¿Hace falta que sea de esta manera? Una pena.

En la semana ya se puso en marcha por redes sociales el operativo Laucha. ¿Por qué no juega? ¿Entran todos menos él sin importar el panorama? «Es un muchacho que siempre tira para adelante», relata el Profe Pellegrino en conferencia. Pero luego, el Laucha solo transpira bajo la atenta mirada del preparador físico saludando a la platea. Insólito. Lo peor, el premio consuelo: ponerlo a los 89 minutos de juego.

«Hay una mezcla de sensaciones. Me gustaría jugar más, entreno todos los días y me siento bien. Me preparo para todo el partido, no para un ratito. Son decisiones del entrenador, verá mejor a otro… Es el que manda. Que sume minutos fue gracias a parte de la gente, y eso no tiene precio. Es el mejor premio», declaró post triunfo el Laucha. Hábil, pícaro. Como siempre. Dijo demasiado. Sonriente, como cuando Bou le fue a dedicar el gol con un abrazo inolvidable. O misma situación, pero con Izquierdoz tras el silbato final. Todos bancan al ídolo. Va, casi todos…


1 Comentario
me parece injusto que el señor Acosta no juegue…Un par de minutos no es jugar…Se merece más respeto…entrena..no se lesiona…está presente siempre y hoy es el más hincha dentro y fuera de la cancha….No me vengan que está bajo…que no rinde etc etc etc…Leo comentarios (muchos)defenestrando y humillando a jugadores y después se tienen que cerrar la boca x que ese jugador anduvo bien…SR PELEGRINO X FAVOR UN POCO DE RESPETO CON EL SR ACOSTA Y HAGALO JUGAR… gracias