El Granate debutó con derrota 2-0 en la Zona B del Torneo Apertura. Herrera y Obredor convirtieron para el equipo de Fabbiani, que fue pura contundencia y aprovechó errores básicos en los goles.
Lateral mal hecho, primer gol de Riestra. Y de un lateral rival, despeje hacia el medio de Boggio y segundo gol de Riestra. Todo en el último cuarto de hora. A los 31 y 40 minutos del complemento. Así lo perdió Lanús, que arrancó con un preocupante 0-2 como local en el debut de Mauricio Pellegrino como entrenador.
Las intenciones fueron buenas, es cierto. Dominador del juego y cerca del 70% de posesión de pelota, que en general no se tradujo a situaciones de riesgo al arco de Arce. Si bien el Grana tuvo sus chances.
En el primer tiempo, con una volea de Orozco y un derechazo de Salvio que encontraron bien parado al arquero del Malevo. El Toto tuvo otra luego de un centro atrás de Franco, un recurso bastante utilizado, aunque le erró al arco. No obstante, la visita también inquietó a partir de un error no forzado del Cali Izquierdoz, que se la dejó corta atrás a Losada y casi le sirve el gol a Herrera. En la línea salvó Muñoz, de lo más firme y parejo del equipo.
La etapa final mostró la misma línea. Lanús con la iniciativa, manteniendo el 4-2-3-1 y teniendo más participativo a Bou. Riestra, con la línea de cinco bien agrupada atrás y los dos tanques arriba. En la mejor combinación ofensiva del partido, Carrera elevó el remate tras taco de Marcelino y asistencia del nueve. Enseguida, Orozco no pudo conectar un centro demasiado fuerte de Marcich. Parecía que era el momento del Grana. Sólo un espejismo...
Jonathan Herrera capitalizó la apatía en la marca y adelantó al elenco del Ogro Fabbiani con un cabezazo implacable. Unos minutos antes, Pellegrino mandó a la cancha a Segovia, de buen ingreso. También a Peña Biafore y el Laucha Acosta. Después del gol, a Boggio y el debut del paraguayo Ronaldo Dejesús. No importó demasiado el cambio de figuritas. A Lanús le faltó rebeldía y a la vez desnudó apatía en el fondo. Como en el segundo tanto, un golazo del debutante Gabriel Obredor, tras un rechazo defectuoso de Boggio que costó caro.
Silbidos para el equipo de Pellegrino, que recibió un golpe inesperado en el inicio de temporada. En cuatro días hay revancha. El martes en el Gigante de Arroyito contra un Central entonado luego de ganarle 3-0 a Godoy Cruz en Mendoza. Prueba de carácter, justo lo que le faltó al Granate en un estreno opaco.