Con goles de Canale, Salvio y Marcelino Moreno, el equipo de Pellegrino venció 3-1 a Atlético Tucumán, a una semana de definir la Sudamericana ante Mineiro. El Grana terminó con 30 puntos en la Zona B y tiene un pie en la próxima Copa.

Lanús viaja a Paraguay con la flechita para arriba. Después de algunos cuestionamientos y un punto obtenido de los últimos seis posibles, el equipo de Pellegrino no dejó dudas y superó 3-1 a Atlético Tucumán para llegar entonado a la gran final de la Copa Sudamericana.
Era un partido difícil de jugar para el Granate, a una semana de definir un título, pero a la vez sabiendo que necesitaba el triunfo para quedar cerca de asegurar participación internacional en 2026. Así lo entendió su técnico, que no se guardó nada y puso en cancha a los posibles once titulares que irán por la gloria en Asunción.

Fue un buen comienzo de Lanús, intenso en la presión y con chispa en ofensiva. Salvio avisó con un remate apenas alto y después avisó con un doble cabezazo que no llegó por poco a destino de red. Pasaron un par de minutos y se repitió la fórmula, esta vez con éxito: Marcich mandó un centro que bajó Castillo y encontró solo a la altura del punto penal a José María Canale, letal en el campeonato, para conectar de cabeza y marcar el 1 a 0 en 19′. ¡Cuarto gol del paraguayo!
Con la desventaja reaccionó el elenco del interino Hugo Colace. Ramiro Ruiz Rodríguez avisó en dos ocasiones, con un remate por encima del travesaño y un cabezazo a la cara externa del arco, entrando por el segundo palo. Hasta que la tercera fue la vencida: jugadón de Laméndola por izquierda, con caño incluido, para el testazo del 22 por el centro del área. Merecido 1 a 1 para los tucumanos y en tablas al descanso.

El segundo tiempo arrancó con una postura similar a cómo terminó el primero, con el Decano mejor plantado. El Tucu Díaz tuvo su chance, con un latigazo bajo que capturó bien Losada. El Grana levantó en su juego y a partir de los 15′ justificó ampliamente lo que sería un triunfo convincente. A Salvio le anularon -bien- un gol por mano, pero el Toto tuvo revancha a los 27′. Trepada de Marcich, buscapié no pudo conectar bien Marcelino y por detrás apareció el 11 Granate, para convertir con suspenso. Ortiz llegó a rechazar pero la pelota había traspasado claramente la línea de gol.
Enseguida, a los 31′, después del segundo llegó el tercero en una ráfaga letal de Lanús. Marcelino presionó alta, Carrera abrió hacia la izquierda para Marcich, clave y con participación en todos los goles. El lateral levantó la cabeza y lo vio en el corazón del área a Moreno, quien enganchó hacia afuera y la ubicó junto al palo más lejano de Mansilla con una enorme definición. Gol y figura para Lino, el señor 10, que después se fue ovacionado por toda La Fortaleza.

Triunfo clave para ganar en confianza y viajar más motivado que nunca a Paraguay. El equipo de Pellegrino se despidió de la Zona B con 30 puntos y un segundo puesto hasta que juegue Riestra, el único que lo puede superar. Mientras se enfoca en la final, a esperar rival en Octavos del Clausura y que acompañe algún resultado para asegurar el pasaje a la próxima Copa Sudamericana, que puede ser Granate en una semana.

