El Granate clavó su octavo triunfo al hilo al derrotar 91-54 a Atlético Pilar para clausurar una etapa regular inolvidable. El próximo fin de semana será anfitrión durante la primera ronda de cuadrangulares.
Rayana a la perfección, como elucubrada en un sueño. Apenas una sola piedra en ese extenso camino, el que transitó con soltura, solidez y elegancia. Lanús construyó una Fase Regular espectacular, merced a una cosecha pasmosa de trece alegrías y un solo traspié, en La Plata. Así le bajó la cortina a esta etapa de La Liga Argentina, al hilvanar su octava victoria consecutiva al doblegar 91-54 a Atlético Pilar.
El Granate ratificó su condición de mejor equipo de toda la competencia, con su enorme 92.8% de productividad, en su último compromiso del calendario contra el Rancho, donde no aminoró jamás su marcha y subyugó con prepotencia al oponente desde el salto inicial. Por su parte, el elenco de Roberto Pavlotsky quedó con una marca 3-10 y será octavo en la Zona A.
En un rendimiento colectivo intenso y atildado, Lanús disfrutó de la tarea de Juan Cruz Scacchi con 13 puntos, 11 rebotes, 3 asistencias y 2 recuperos, además de un aporte interesante de Joaquín Ríos y Sebastián Chaine con 12 unidades. En la visita se destacó Bruno Conti con 15 tantos.
La noche arrancó con un goleo alto del Grana, que fluyó con rapidez en el pleito y se escapó 13-4, a los tres minutos y obligó al tiempo muerto del rival. Así, el Rancho optimizó su andar con un Conti (8) encendido y estampó un pasaje 7-0 para recortar cifras 13-11. Empero, el dueño de casa cerró el cuarto arriba 24-19.
En el segundo capítulo se rompió la paridad, ya que Lanús voló en el parquet con una multiplicidad de recursos y de manos anotadoras, para un periodo tremendo de 25-10. El local castigó en contraataque y también destrabó la zona 2-3 que ensayó el oponente. El rendimiento ofensivo se reflejó en el 58% de tiros de campo en ese segmento y también en la renta holgada de 49-29 con la que se retiró al entretiempo.
Tras las charlas en vestuarios, el elenco de Saborido no apaciguó su voracidad e incluso concretó una corrida 11-0, con un Ríos (7) incisivo, para escaparse 60-29, a falta de 5:15 minutos. Atlético Pilar abusó de los triples (3/14) y padeció la concentración del rival. De ese modo, se terminó el segmento con una abultada renta 68-42.
El juego ya estaba resuelto en el último cuarto, pero igualmente el local mantuvo la intensidad con la rotación del banco, el salto de los juveniles como Sacchi que se despachó con 10 puntos. Por su parte, el Rancho también apostó por minutos para los jóvenes. En definitiva, Lanús caminó con solidez al triunfo 91-54.
Informe y fotos: Prensa Lanús