Con un nuevo doblete de Leandro Díaz, el Granate se impuso por 2 a 1 frente al conjunto de Junín, que llegó al descuento en el complemento por el cabezazo de Lisandro López. De esta manera, el equipo de Kudelka se acomoda en el lote de los de arriba y sueña con despegar.

¿El juego, importa? ¿Las formas? ¿Los reiterados errores que se repiten? ¿Las pocas ideas cuando estas en ventaja? ¿Por qué se mete tan atrás el equipo cuando va ganando? Son preguntas que, por ahora, siguen sin tener respuestas. Pero si uno va al grano, puede ver a Lanús bien arriba en la tabla de posiciones. Sumando puntos que ilusionan con despegar. Falta ajustar muchas cosas, pero con un triunfo en el bolsillo la historia es otra. Con Sarmiento, todo parecía encaminarse a ser una tarde en paz. Pero no lo fue. Primero hubo que saber sufrir, como de costumbre.

En la primera parte, salvo una primera llegada, clara, de la visita que se estrelló en el travesaño, Lanús fue protagonista y poco a poco fue ganando terreno y llegadas contra el arco visitante. Belmonte de cabeza, el Tucu de volea y alguna de Boggio. Hasta que a los 27, Troyansky sacó un penal de la galera y Leandro Díaz cambió por el primer grito de la tarde. El local se asentó en campo rival, insistió y llegó al segundo por la misma fórmula. Penal al Laucha Acosta a los 45, y el Tucu, esta vez con suspenso ya que en primera instancia Meza tapó su remate, estiró el marcador a 2 a 0. Bien los centrales, movedizo Boggio y un interesante aporte de Troyansky en ofensiva para irse al descanso sin problemas.

Los cuales iban a empezar a asomar en el segundo tiempo. Lanús se retrasó, Sarmiento creció, y poco a poco la cosa se fue complicando. La visita comenzó a llegar con claridad contra el arco de Lucas Acosta y tuvo varias aproximaciones. Y para colmo de malas, a los 17′, Juan Canale no solo que se iba a ir expulsado por doble amonestación, si no que también con signos de mucho dolor en su brazo izquierdo (minutos después se confirmó la fractura en el ante brazo por lo que deberá ser intervenido quirúrgicamente). 

Apenas cinco minutos después, a los 22′, la visita llegaba al descuento por medio de Lisandro López, desviando de cabeza un centro desde la derecha. Por suerte para el Grana, el partido se iba a equilibrar a los 29′, por la expulsión de Gabriel Díaz por una dura infracción sobre Boggio, que luego de tiro libre casi define el encuentro. Los dirigidos por Damonte insistirían por la igualdad, y gracias al palo derecho de Acosta no lo consiguieron: media vuelta de Toledo, y salvada milagrosa del poste. Luego seguirían los centros sobre el área Granate y una chance neta de gol de Loaiza que tapó Meza.

Pero fue victoria nomás, 2 a 1, que le permite al equipo de Kudelka acumular 4 partidos consecutivos invicto, con dos triunfos y dos empates. Y un muy buen porcentaje jugando en la Fortaleza: 72%, producto de cuatro ganados, un empate y una derrota.