Lanús sigue en la búsqueda de la fórmula del éxito con la cual logró dos títulos en no hace mucho tiempo. Si bien los resultados no llegan todavía, tanto contra Boca como ante Belgrano se notaron destellos del equipo campeón, siempre con la pelota contra el piso y atacando constantemente. El premio, el cabezazo de Acosta sobre el final.
Los festejos merecidos por una excelente primera parte del año ya quedaron atrás hace rato. Es hora de empezar Lanús, de retomar el camino del éxito. Quedar afuera de dos competencias tan rápido y estar tan lejos del puntero en el campeonato local debe ser el punto de partida para volver a ser ese equipo que enamoró a más de uno. Si bien con intenciones o merecimientos no alcanza, queda la tranquilidad de que de a poco las cosas volverán a la normalidad. Los encuentros ante Boca y Belgrano, son los mejores ejemplos. Claro, es cierto que hay que ajustar algunas piezas, pero en líneas generales está más que a la vista que el Grana debería tener mucho más.
Insistir. Seguir con la misma idea. Atacar siempre, y con la pelota por el piso como le gusta al entrenador. El segundo tiempo en Córdoba como así también pasajes del choque ante el Xeneize mostraron eso. Toques cortos, variantes en ofensiva y posesión del balón. Falta eficacia, por algo Lanús es uno de los que menos convirtió en estas primeras fechas. Con el cabezazo de Lautaro Acosta, apenas suma dos gritos (ambos conseguidos casualmente por el Laucha). Otra pudo haber sido la historia si la pelota hubiese entrado más seguido, está claro. A esta altura, en el campeonato pasado, los de Almirón no solo que habían marcado en todos los partidos (siete goles), si no que José Sand estaba inspirado. El Pepe, que por ahora continúa sin poder meterla, llevaba cinco tantos en la misma cantidad del partidos.
El camino será largo, queda mucho por delante. Tres empates, una victoria y una derrota. Seis puntos, dos goles a favor y dos en contra. Nada grave. Por delante, compromisos como recibir en lo inmediato a Godoy Cruz en la Fortaleza, tras el receso por Eliminatorias. Luego vendrán Quilmes, Tigre, Sarmiento y Atlético de Tucumán. El tiempo de descanso vienen bien para repasar errores y mejorar virtudes. De esa manera, volverán los resultados y también las sonrisas que hoy se están negando.
