Lo afirmó Marcelo Herrera tras la gran victoria ante Rosario Central, que le permite al Granate acercarse a tan sólo tres unidades del nuevo líder Boca. “El campeonato nos costó un poco al principio, pero pudimos acomodarnos y terminar lo más cerca posible del puntero”, remarcó el defensor, que destacó la labor de sus compañeros para llevarse los tres puntos: “La clave estuvo en aprovechar la velocidad de Acosta y Silva. Por ahí vinieron los goles”.

Por Johanna Arriola. Fueron más que tres puntos los que ganó Lanús el domingo en el Gigante de Arroyito. Aunque Coudet puso en cancha un equipo alternativo -teniendo en cuenta la final del jueves ante River-, Rosario Central siempre es una amenaza, y más cuando juega en su casa con su gente.

“Fue un partido complicado. Sabíamos que teníamos que presionarlos desde el inicio. La clave estuvo en saber aprovechar la velocidad del Laucha (Acosta) y de Ale (Silva) y por ahí fue por donde vinieron los goles“, reconoció Marcelo Herrera, en su vuelta al once inicial. Y continuó: “Central tiró muchos centros, pero estuvimos bien. Salvo algunas pelotas, no tuvieron otras situaciones claras”.

Con respecto al marco con que se encontró el Granate en Rosario, el defensor mantuvo: “El Gigante de Arroyito es una cancha difícil. Más allá de que hayan jugado con suplentes, es un rival muy duro y son jugadores de primer recambio. Además, tienen un equipo muy competitivo. A pesar de eso, pudimos dar vuelta el resultado”, sostuvo.

Finalmente, el zaguero hizo hincapié en la levantada que llevó a cabo Lanús en los últimos partidos del torneo. “El campeonato en un principio nos costó un poco ya que perdimos puntos sin merecerlo. Pero, pudimos acomodarnos y cumplir con nuestro objetivo que era terminar lo más cerca del puntero posible. Ahora hay que esperar y ver cómo continúa la segunda parte”.