Picante. Blanco perdió la titularidad con la llegada de Silva. |
Más allá de cierto fastidio acumulado por su salida del equipo, el nacido en Entre Ríos contó cómo se sintió al enterarse que no iba a ser de la partida y se ilusionó con jugar al menos algunos minutos. «Nunca pedí una explicación cuando tuve que ir al banco. Es lógico que uno siempre quiere jugar y se enoja o se pone triste cuando no lo hace de entrada. Hoy me toca estar afuera de los titulares y voy a tratar de apoyar a los que jueguen. Si me llega la chance de entrar aunque sea en el segundo tiempo, intentaré dar el máximo por el equipo», prometió Blanco, quien también hizo un balance de su desempeño en el Sur: «Me trataron bien desde el primer momento que llegué. En el torneo pasado jugué de titular como yo quería y me parece que le cumplí al cuerpo técnico con lo que me pidieron. Más allá de tener una cuenta pendiente en lo personal porque quería hacer más goles. Pero creo que mi semestre no fue tan malo…».
Figuró en carpeta de Walter Perazzo para reforzar Olimpo y su nombre fue inscripto hace unas horas en AFA por un interés de Argentinos Juniors. No obstante, Ismael optó por quedarse para tener revancha en Lanús y a la vez satisfacer una necesidad familiar. «Estoy muy contento acá y, si bien recibí varias ofertas, no quise irme. Tengo una familia y elegí quedarme para no obligarlos a moverse a otro lado conmigo», explicó el Zungui, que prometió dar pelea para ganarse un lugar en la consideración de Guillermo. «Por suerte siempre estuve fuerte en lo emocional y tengo el apoyo de la familia que me acompaña en todo momento. Sé lo que puedo dar y estoy tranquilo porque esto es largo y recién empieza. Tuve varias experiencias similares en mi carrera y no voy a volverme loco ahora (Sic). No pienso bajar los brazos», avisó.