El Granate sumó su tercer triunfo de manera consecutiva en el torneo local y se prendió en la lucha por el título. Tras el mal trago por la Copa del jueves en Colombia, el equipo de los Mellizos tuvo su revancha en la Fortaleza y venció a un viejo verdugo de los últimos años: Quilmes. Fue 1 a 0 gracias al tanto de Jorge Pereyra Díaz a los 28 minutos del segundo tiempo, en una buena maniobra personal del juvenil Valdez Chamorro y un centro del uruguayo Alejandro Silva, uno de los mejores. De esta manera, y dejando como un mal recuerdo el flojo comienzo en el Final 2014, Lanús escaló varias posiciones y quedó quinto, a dos unidades de los punteros Colón y Estudiantes. Ahora sí, a pensar con tranquilidad en el choque clave ante Deportivo Cali para seguir con vida en la Libertadores. La primera etapa dio la sensación que sirvió para que ambos equipos se midan. Se observen, como en el boxeo. Dio la sensación de que ninguno arriesgó por demás o fue a fondo a buscar el objetivo. Es decir, ni Lanús quemar todas sus armas para abrir el marcador ni Quilmes replegarse del todo para conservar el empate que sin dudas le caía mejor. Sólo fueron intenciones, ideas, diferentes propuestas. El local fue más, es cierto, pero no lo suficiente como para decir que mereció irse en ventaja. Con un Ortiz que de a poco se convirtió en eje del equipo, capaz de manejar los tiempos y elegir los caminos. Con un González colaborador en ese sentido, con más desgate, y con un Alejandro Silva como alternativa. El resto, poquito y nada. Chamorro intentó mostrarse, pero falló. Junior y Pereyra Díaz se encerraron por los extremos, y el Tanque Silva arriba apenas incomodó a los centrales del rival. Solo aproximaciones, eso fue Lanús. Ni siquiera hubo una situación neta de peligro. Una excepción podría ser el disparo de Pasquini a la salida de una buena pelota parada elaborada. El zurdazo salió cerquita del palo izquierdo, pero no fue suficiente como para irse al descanso conforme. Tener paciencia, a veces, es peligroso. Más contra un equipo como Quilmes y un DT como Caruso. El correr de los minutos hizo que el Grana comience a equivocar los caminos y fallar en los pases. Así, el Cervecero se sintió más seguro y hasta se animó a jugar el último cuarto aunque nunca le alcanzó como para generar alguna chance en contra de Marchesín. El 0 a 0 fue justo al cabo de los 45 minutos iniciales. Desde el inicio del complemento mostró un Lanús con mayor iniciativa, más adelantado y con signos de reacción con el fin único de abrir el marcador. Con esfuerzo y velocidad, el equipo de Barros Schelotto creció y avanzó pero no se lució. Todo lo contrario. Quilmes mantuvo su estilo, refugiado y resistiendo el avance granate. A los 7 se iba a dar la primera situación clara del encuentro. Sí, tuvieron que pasar 52 minutos para que existe peligro concreto en el arco del Cervecero. Garnier salió mal desde el fondo y Pereyra Díaz aprovechó para quedar mano a mano frente a Dulcich. A la hora de enfrentarlo, el riojano se demoró por demás, se enredó y la perdió. Pero tuvo una segunda oportunidad producto de la presión de Ortiz. Ahí sí se movió con mayor lucidez, dejó un rival en el camino pero remató por encima del travesaño. Un aviso de lo que podía venir, a pesar del enojo del Tanque Silva quien reclamaba en soledad para poner el primero. A los 12, González probó de media distancia sin suerte ya que el arquero de la visita logró contener con seguridad junto al palo derecho.
Más allá de la mejoría, el hecho de no poder marcar hizo que el Grana comience a desesperarse por temor a que no se de lo buscado. No estar fino y lograr desequilibrar en el juego individual hizo que el envión de los primeros minutos baje en intensidad. Eso hasta los 28. Valdez Chamorro se vistió en enganche, dejó dos en el camino y abrió para Ale Silva, quien por derecho ejecutó un centro preciso al segundo palo. Allí, Pereyra Díaz ganó de cabeza con el último esfuerzo y quebró la resistencia del equipo de Caruso: 1 a 0. Con poco más de un cuarto por delante, Quilmes salió del refugio y tuvo chances para conseguir la igualdad. Telechea estrelló la pelota en el travesaño tras una pelota parada y sobre el final Marchesín apareció en su máximo esplendor con una doble tapada que valieron los tres puntos. Primero a Ríos, en el primer palo, y luego a Telechea, abajo, con la punto de los guantes. Antes, Ayala (de buen ingreso), cerca había estado de liquidar el pleito con un tiro libre que se estrelló también en el horizontal. SÍNTESIS DEL PARTIDO:
Lanús (1): 1- Agustín Marchesín; 3- Alejandro Silva, 2- Paolo Goltz (C), 24- Carlos Izquierdoz, 21- Nicolás Pasquini; 5- Diego González, 22- Jorge Ortiz, 11- Jorge Valdez Chamorro; 14- Jorge Pereyra Díaz, 9- Santiago Silva y 23- Oscar Benítez. DT: Guillermo Barros Schelotto.
Suplentes: 31- Esteban Andrada, 4- Carlos Araujo, 6- Maximiliano Velázquez, 15- Leandro Somoza, 16- Víctor Ayala, 18- Ismael Blanco y 30- Bruno Vides.
El arquero, que viene de ser uno de los puntos más altos del equipo a lo largo del semestre, se mostró feliz por el momento del equipo que tiene chance de ingresar a la Copa: “El objetivo era lejano, hoy estamos cerca. Nos propusimos entrar a la Sudamericana y ojalá así sea”. Por otro lado, el Inter de Miami de Mascherano estaría tras sus pasos para llevarlo a los Estados Unidos.
El Granate clavó su octavo triunfo al hilo al derrotar 91-54 a Atlético Pilar para clausurar una etapa regular inolvidable. El próximo fin de semana será anfitrión durante la primera ronda de cuadrangulares.
Luego del triunfo 2-0 ante Instituto, el técnico del Grana hizo un balance de su gestión al frente del primer equipo y destacó cada una de las metas logradas desde que asumió el cargo, en octubre de 2023. Repasá las frases destacadas de la última conferencia de prensa como local.