El Toto regresó a la Fortaleza, fue ovacionado por todo el Estadio y se fue sonriente tras haber sumado de a tres ante Belgrano. “Muchas lindas sensaciones, volver con toda mi gente, con mi familia en la tribuna, ganado… Me pasaron cosas hermosas y disfruté mucho el momento”, expresó.

Pasaron casi 15 años de su último partido en la Fortaleza, cuando le tocó perder 0-3 ante Chacarita con Luis Zubeldía en el banco de suplentes. Con apenas 19 pirulos, Eduardo Salvio tenía mucho por dar lejos de casa. Pero el tiempo pasa rápido, y el niño se transformó en hombre. Pasó por varias Ligas, ganó muchos títulos y hasta jugó un Mundial. Pero todo vuelve, dicen. Y el Toto cumplió. Ovación, sonrisas y triunfo. Todo salió a la perfección. “Muchas lindas sensaciones, volver con toda mi gente, con mi familia en la tribuna, ganado… Me pasaron cosas hermosas y disfruté mucho el momento”, comentó en zona de vestuarios el futbolista de ya 34 años, quien agregó: “En lo personal me sentí bien, no tengo dudas que con el correr de los partidos me voy a ir sintiendo mejor. Literalmente es mi primer partido ya que no jugué en la pretemporada por la lesión. Es normal, como lo me lo esperaba”.

Sobre el rendimiento del equipo afirmó que se logró el objetivo de ganar, pero desde su visión con cosas por mejorar: “Debemos mejorar porque sumos un equipo muy vertical y los partidos terminan siendo de mucha ida y vuelta. Tenemos muchos jugadores que roban la pelota y salen para adelante, a la hora de defender podemos sufrir un poco. Son cosas a mejorar, pero estamos por el buen camino”. Y agregó: “Con el equipo que tenemos, y la calidad de jugadores que hay en Lanús, el objetivo es pelear arriba. Yo confío en eso, veo cómo se entrena, la jerarquía que hay, si nos proponemos eso no tengo dudas que lo vamos a lograr”.

Por otro lado, le dedicó unas palabras a Sanabria, de gran partido: “Mateo me sorprendió mucho, tiene un futuro tremendo. Depende de él y un poco de nosotros en ayudarlo en su crecimiento. No se tiene que conformar con esto que logró, siempre tiene que ir por más. Me pone muy contento porque trabaja muy bien, y está a la vista de todos lo que puede conseguir”.