Matías Martínez, de gran nivel en el triunfo por la mínima ante All Boys, se sinceró sobre lo que significa ocupar los lugares de Goltz e Izquierdoz, a quien podría sustituir el miércoles en el pendiente con Tigre por acumulación de amarillas. El Chaco analizó el friccionado partido con los de Floresta, cómo se siente en lo personal y si valió como un gol la pelota que le sacó en la línea a Torassa.
Resurgió de las cenizas y ahora vuela a la par del resto. Tras varios meses sin jugar por la lesión en los meniscos de la rodilla derecha, Matías Martínez se ganó un lugar en la consideración de los Mellizos y es la primera opción de recambio ante la ausencia de algún central titular. “Me siento muy bien, con la confianza de los compañeros y del cuerpo técnico. Reemplazar a Paolo (Goltz) o al Cali (Izquierdoz) es una presión muy grande. Trato de hacer lo mejor para el bienestar del equipo y estoy contento porque las cosas están saliendo bien”, se alegró el Chaco, clave para rechazar en la línea un remate de Torassa que se metía y así sostener la ventaja ante All Boys. “No sé si valió un gol, le puede tocar a cualquiera. Por suerte estuve ahí y sirvió para ayudar al equipo. El fútbol es así: si no lo cerrás quizás a lo último te convierten”, dijo.
En otro orden, el ex Racing y Argentinos analizó la trabajada victoria contra el conjunto de Ricardo Rodríguez, que lo obligó a sufrir hasta el final. “Fue un partido complicado. Sabíamos que iba a ser así porque ellos están comprometidos con el descenso y venían a sumar. Nos costó muchísimo, pero por suerte llegó el gol y después lo aguantamos. Son tres puntos importantes que nos dan tranquilidad sabiendo que se viene otro encuentro muy difícil con Tigre para quedar cerca de la punta”, valuó Martínez, quien amplió: “En el primer tiempo nos costó mucho manejar la pelota porque All Boys no nos dejó espacios y jugó bien de contra. Quizás no pudimos desplegar el juego que Lanús tiene acostumbrados a todos, pero se consiguió un triunfo importantísimo en la lucha por el campeonato”.
Un tema recurrente de consulta en la seguidilla infernal de Lanús suele ser el cansancio por el trajín de partidos. Al respecto, Matías opinó: “En mi caso que no jugué en México y venía de hacerlo el fin de semana (con Arsenal) pude terminar mejor que mis compañeros. Ahora otra vez se viene un partido en tres días y el técnico decidirá quiénes deben estar para ganarle a Tigre. Lo que él elija va a estar bien para que todos estemos recuperados”.
Ilusionado como todo el pueblo granate, el Chaco se fue satisfecho por seguir en carrera para obtener la tan ansiada doble corona. “El objetivo que nos pusimos en la pretemporada era pelear los dos frentes y estamos haciendo un buen trabajo, en cuartos de la Copa y a cinco puntos de Gimnasia con un partido menos”, soltó.