Superlativo. Marchesín fue clave con su doble tapada al final.
Agustín Marchesín, clave con su doble tapada sobre la hora ante Quilmes, afirmó que Lanús nunca dejó de lado la propuesta audaz pese a los malos resultados en el arranque del año. “Llegamos a estar anteúltimos y ahora nos metimos de vuelta en el torneo. Nunca abandonamos la línea de juego y eso nos permite confiar más en nosotros mismos”, soltó Marche, que mantuvo la valla invicta por tercer partido consecutivo en el campeonato. “Jugamos con un rival difícil, que salió a esperar y nos complicó con dos pelotas paradas. Hablamos que debíamos tener la tranquilidad suficiente para abrir el marcador y a partir de ahí aprovechar los espacios que se podían crear cuando ellos salgan un poco más”, dijo sobre el triunfo por la mínima frente al Cervecero. Además, al arquero que el domingo cumplió 26 años aún lo invade la desazón por la expulsión en Colombia, que le impediría atajar al menos en los próximos dos compromisos de la Libertadores. “Me sorprendió la roja y me dolió porque, inclusive con la calentura de la derrota, estoy convencido que me comporté bien. Le juré por mi familia al técnico que nunca me había dirigido con tanto respeto a un árbitro, pero creo que al hablar otro idioma me entendió mal lo que le quise decir. Quería estar con el grupo porque el club pierde prestigio y plata si no pasa la fase de grupos”, se lamentó el uno granate.
-No tuviste trabajo hasta el final del partido y fuiste clave para sostener la victoria.
Me voy contento porque el equipo pudo ganar y ya es el tercer partido que no nos hacen goles en el torneo local. Jugamos con un rival difícil, que salió a esperar y apostó a la contra. Si bien las dos llegadas que tuvo fueron de pelota parada. Sabíamos que es un equipo que se maneja muy bien por esa vía. Hablamos que debíamos tener la tranquilidad suficiente para abrir el marcador y a partir de ahí aprovechar los espacios que se podían crear cuando ellos salgan un poco más.
-Ganaron cuatro de los últimos cinco partidos y en un torneo irregular se acomodaron bien…
Sí, sabíamos que ganando nos poníamos a dos puntos de los líderes. Ahora la ilusión es no perderle pisada a los de arriba y saber que estamos de vuelta metidos en el torneo; no habíamos arrancado bien pero por suerte nos repusimos. Ojalá podamos seguir por este camino.
-¿Te sorprende que hayan escalado tantas posiciones en sólo tres fechas?
Realmente sí, llegamos a estar anteúltimos… Ganamos jugando bien y siempre intentamos hacerlo así, no abandonamos la línea de juego que tenemos y eso es lo más importante. Nos da la posibilidad de confiar más en nosotros mismos.
-¿Dura todavía la bronca por la expulsión en Colombia?
La verdad que sí. Me duele porque uno lucha por cambiar esa imagen que había quedado cuando me echaron con Central. Sinceramente no le dije nada al juez, eso mismo le comenté al técnico (Guillermo Barros Schelotto). Le juré por mi familia que nunca me había dirigido con tanto respeto a un árbitro como lo hice. Me sorprendió la roja y me dolió porque, inclusive con la calentura de la derrota, estoy convencido que me comporté bien. Creo que al hablar otro idioma, él entendió mal lo que le quise decir. Y después cuando intenté explicarle ya era demasiado tarde. Sé que soy una persona que protesta bastante y cuando me equivoqué siempre pedí disculpas, pero esta vez no fue como las anteriores y me castigaron igual.
-Los fallos suelen ser más duros a nivel confederación que en el ámbito local. ¿Pudiste hablar con el árbitro para que la sanción no sea tan severa?
No pude porque me tocó ir al dóping. Estoy muy dolido porque quiero estar con el grupo en un partido tan importante, jugar la Libertadores es algo que no se da todos los días. Somos un equipo que luchamos mucho para clasificar y si no pasamos la fase de grupos, el club pierde prestigio, plata y la posibilidad de conseguir cosas importantes con este club. Por eso fue una desazón muy grande cuando vi la roja.
-Además de la valla invicta se hicieron fuertes de local. ¿Puede ser una motivación pensando que tienen dos compromisos decisivos por la Copa en esta cancha?
Sin dudas que sí. Tenemos que pensar en seguir creciendo como equipo y mejorar la solidez que hemos conseguido. Al principio del torneo nos convertían mucho, pero ahora estamos más fuertes mentalmente y eso habla muy bien del grupo, que siempre trabaja para seguir logrando cosas importantes.
-¿Todavía sueñan con clasificar a octavos de final?
Mientras tengamos posibilidades matemáticas, el equipo no va a perder la ilusión y las ganas de pasar de ronda. Tuvimos la desgracia que se nos haya escapado el partido con Deportivo Cali, porque con Cerro Porteño jugamos mal y ante O’Higgins fue muy trabado y con un rival que se plantó excelente en el campo. En el último tuvimos muchas situaciones para liquidarlo, no lo supimos aprovechar y después lo terminamos pagando caro. Este equipo viene de ser subcampeón en el torneo y campeón de la Sudamericana, por eso creo que se merece respeto. Después depende de nosotros hablar adentro de la cancha y tratar de imponer lo bueno que hicimos el semestre pasado.
ESCUCHÁ A MARCHESÍN, CLAVE CON SUS TAPADAS EN EL FINAL:
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