Como esta noche cerró el libro de pases, Lanús decidió inscribir cablegráficamente a Sebastián Blanco en AFA y tendrá una semana para negociar su incorporación mientras aguarda una resolución sobre su futuro. Al borde de estallar las diferencias vigentes con Metalist de Ucrania, donde le queda un año y medio de contrato, Chucky definiría en estos días si vuelve al Granate, siempre y cuando no reciba alguna oferta del exterior que lo seduzca más.
La llama de la ilusión sigue viva. El sueño que desvela a los hinchas de Lanús no es tan remoto. Por el contrario, hay chances concretas que sea el momento de la vuelta tan esperada. Sí, el regreso de Sebastián Blanco al Granate nunca estuvo más cerca. “Es muy factible”, le reconoció a este sitio un alto directivo. Y el optimismo no es para menos: pasaron varios días desde que el volante creativo se entrena en las instalaciones del club y todavía no hay propuestas que lo seduzcan del todo. Sólo ofrecimientos de menor calibre a los que pretende el jugador. Por eso en el Sur no dudaron y, cuando se anunció oficialmente el cierre del libro de pases, inmediatamente lo inscribieron telegráficamente en AFA. Con una semana más para negociar su llegada, se aguarda una resolución sobre su futuro, que podría estar despejado en los próximos días si el representante de Blanquito no trae una oferta firme y convincente.
A todo esto, la relación entre el futbolista y Metalist de Ucrania, club dueño del pase hasta diciembre de 2015, es cada vez más tirante. Los popes europeos insisten que Blanco debe presentarse a la pretemporada con el plantel, tal como establece el vínculo contractual. Mientras tanto, el ex Lanús no da el brazo a torcer y se aferra a la postura de considerarse jugador libre. La delicada situación política que atraviesa el país y su deseo de cambiar de aire en el plano deportivo son los motivos principales que construyen su defensa. A este ritmo no habrá acuerdo entre las partes y el conflicto podría terminar en la Justicia. Entrando en el terreno de las especulaciones, la resolución de FIFA que protege los derechos del trabajador deja mejor parado a Chucky, quien podría jugar si el Grana logra adquirir sus servicios. Aunque claro, no se descarta un resarcimiento económico a la entidad ucraniana a modo de indenmización.
En una nota concebida hace un par de semanas en el Polideportivo, el propio Blanco dio a conocer su versión de los hechos. “No me fui de Ucrania, directamente ni me presenté. Ya manifesté que es un tema de contrato porque hace un tiempo que me quiero ir. Tres años y medio es mucho. Entonces correspondía que el Metalist ofreciera más facilidades para mi salida”, criticó. Y prosiguió: “Me lesioné y viví seis meses pesados por lo que pasaba en el país. Igualmente yo estaba tranquilo cuando todo era preocupación, pero hoy mi pedido pasa por otro lado. Es algo futbolístico y creo que ellos deberían entenderlo para bajar un poco las pretensiones”.
“Allá no vuelvo. Ellos dicen que tengo que presentarme y para mí no es así. Si siguen con esta postura tendremos que resolverlo por otra vía. No tengo miedo a que me intimen”.
Además, sobre su estado físico y futbolístico, Seba admitió que está lejos del ritmo de trabajo que tiene el plantel de Lanús. “No hay parámetros de comparación. Ellos hicieron una pretemporada muy fuerte y ya están en competencia, yo recién empiezo a entrenar”, había dicho en su momento. ¿Cuándo estará en condiciones de jugar si se confirma su vuelta?
Lo que dijo Blanco hace dos semanas
http://www.youtube.com/watch?v=3pktFh1SGyA