En la antesala del encuentro con Colón de Santa Fe, Jorge Almirón, realizó un análisis de las últimas actuaciones, cómo prepara a sus dirigidos para el próximo partido, los jugadores con los que cuenta y el interés por Spinelli y Poblete. Las frases salientes del entrenador de Lanús, en el informe de FG.

Por: María Vázquez

A dos días del próximo compromiso para los dirigidos por Jorge Almirón, el DT analizó el empate contra Arsenal que lo dejó octavo en la tabla de posiciones de la Zona B: “Teníamos una ventaja de 2 a 0, sin hacer demasiado. Después tuvimos el 3-0 y de ahí viene el 2-1. Ya se habló demasiado de los fallos de los árbitros, pero sin duda inciden en el estado anímico. Más allá de eso, el análisis que hago del primer tiempo, es que ellos jugaban 4-4-2 muy claro y los dos nueves quedaban colgados contra nuestros centrales. Entonces, con una ventaja de dos goles, me pareció que no valía la pena seguir arriesgando esa situación y por eso realicé el cambio en el segundo tiempo. Cuando Arsenal marcó el primero, la intención era controlar mejor el partido y tener más situaciones de gol, pero el partido se descontroló. Antes del empate no hubo riesgos y al final casi lo perdemos por una jugada similar. También hubo un claro penal a Mateo (Sanabria) que no cobraron. El partido tuvo muchos momentos que tenemos que aprender a manejar. Hay que crecer como equipo”.

En esa línea y haciendo memoria brevemente de los partidos anteriores, opinó que lo mejor de Lanús fue el primer tiempo contra Tigre y que, más allá de los nombres propios, está en el proceso de búsqueda de un equipo que no sólo ataque bien, sino que defienda bien: “Aunque crean que pienso sólo en lo ofensivo, yo pienso en todo. Necesito encontrar ese equilibrio como equipo. Llevamos cinco partidos en los que han pasado muchas cosas, en distintos escenarios. No planifique quedarnos con uno menos con Huracán y que Braghieri tuviera una lesión que casi le cuesta la vida. Tampoco que tuviéramos que jugar a los tres días con un desgaste importante. En cancha de Estudiantes planificamos una cosa, el campo de juego estaba peor de lo que esperaba. Si me quejo de eso son excusas, pero nosotros trabajamos para jugar de una manera. Si te acostumbras a jugar a eso y después vas de visitante a una cancha donde la tenés que revolear, es complicado. Cada escenario tiene su complejidad, hay que ir resolviendo situaciones. La realidad de hoy es esta, estamos mejorando y me quedo con eso, en el día a día con los jugadores”.

Centrándose en el próximo partido, Jorge reconoció las fortalezas de Colón y cómo prepara al equipo para ese encuentro: “Nos vamos a enfrentar a un rival muy duro, que está arriba por sus méritos. Tiene gente fuerte en pelota parada, un técnico con experiencia. Todos los partidos son diferentes, contra Tigre jugó un tiempo de una manera y otro tiempo de otra. En el medio cambiaron de esquema, de jugadores y no sabemos cómo pueden llegar a venir. De todas maneras, nosotros nos hemos preparado bien y estamos confiados de poder hacer un buen partido”.

Sobre la importancia del compromiso que se viene el domingo en La Fortaleza, Almirón aseguró: “Yo tengo mucho respeto por mis futbolistas. Primero tengo que plantear bien el escenario, el rival, explicar la situación y esperar que ellos entiendan las decisiones. Somos locales, tenemos que ser protagonistas y los puntos son importantes. Después viene el clásico, así que este partido es muy importante. Necesitamos el apoyo de la gente. Ser local es un aliciente, y más en esta cancha que los rivales lo sienten. El equipo tiene que demostrar buen juego y enchufar a la gente. En esa búsqueda estamos”.

En cuanto a los jugadores que tiene a disposición en el plantel, aclaró: “La llegada del entrenador parece que va a cambiar todo enseguida pero no es así. La única manera es viviéndolo, Los chicos necesitan tiempo para ensamblarse. Estoy muy entusiasmado porque hay potencial”.

En ese sentido, también se lamentó por la lesión de Pedro de la Vega, mencionó la falta de continuidad de Diego Valeri y comparó el primer plantel que dirigió con el actual: “En 2016 estaba Gustavo Gómez, jugador de selección con más de 200 partidos. Hoy Lomónaco debutó contra Tigre. Los jugadores necesitan tiempo. Muchos debutaron sin público y no es lo mismo que hacerlo con la gente, que pierde la paciencia, que se enoja. En 2016 ganamos los primeros partidos 1-0 porque el equipo tenía oficio, eso se nota con el tiempo”.

Ante la posibilidad de incorporar a jugadores que volvieron de Ucrania, el DT mencionó: “Si se da la posibilidad de traer a Spinelli será importante, lo mismo con Poblete. Son jugadores con experiencia y eso es importante”.

Párrafo aparte para la vuelta del público en general a Cabrero y Guidi, sobre lo que el entrenador del Grana puntualizó: “Para mí es espectacular que venga gente, que vendan entradas. Si la gente viene a apoyar, dependerá del equipo que se contagie luego. Son pruebas para todo el equipo. ¿Qué mejor que se llene la cancha? Si tenés jugadores con confianza, el aliento de la gente ayuda. Yo quiero el estadio lleno siempre”.