Tras la heróica victoria frente a Arsenal con dos goles agónicos, Nicolás Pasquini entendió que Lanús buscó los tres puntos hasta conseguirlos. “Fue un partido muy emotivo, casi un milagro. Luchamos hasta el final y sirvió para seguir prendidos”, aseguró el lateral izquierdo, que hace cuatro fechas le gana la pulseada a un histórico como Maxi Velázquez.
En la Fortaleza, el equipo de los mellizos Barros Schelotto protagonizó un triunfo inolvidable frente a los dirigidos por Palermo y Abbondanzieri. Lanús debía ganar para no perderle pisada a River y así ponerse transitoriamente a sólo un punto. Fue un espectáculo no apto para cardíacos y pocas veces visto, donde el Grana se impuso por 3 a 2 en los instantes finales del juego.
“Lo buscamos siempre. Lo empatamos, después se dio un minuto más y lo pudimos ganar. Estuvimos viendo todo en la tele y el tercer gol lo hacemos sobre la hora. La pelota estaba en juego y no lo podía terminar”, aseguró Nicolás Pasquini en relación al final épico y la polémica por los minutos que adicionó Merlos.
El Granate no tuvo una de sus mejores actuaciones, es indudable. Le jugó una mala pasada la desesperación y la necesidad de ganar, algo que también apreció el lateral cordobés. “Jugamos mucho al pelotazo. Llegó el segundo gol de Arsenal y se nos complicó el partido. Sólo quedaba empatarlo como sea”, admitió Pasquini, quien a fuerza de buenas actuaciones desplazó del puesto a un histórico del club como Maxi Velázquez.
Cuando Lanús convirtió el tanto de la victoria, en el noveno minuto adicionado, todo Arsenal salió disparado a reclamarle al árbitro del encuentro. Sobre esta situación opinó Pasquini: “Se armó un tumulto y se le fueron todos encima. Hubo algunos empujones pero por suerte no pasó a mayores”.
La palabra de Pasquini
http://www.youtube.com/watch?v=uHuEeuZivLM
Por Cristian Tavoliere