No se abrace. El Grana demostró un gran poderío ofensivo pero nada más concretó una de las ¡¡¡15!!! que generó en todo el partido ante la Crema. Pero que el árbol no tape el bosque. Ese no fue el único motivo por el cual no se ganó con Rafaela. Participá de la encuesta al final de la nota y dejanos tu punto de vista. 

En esta versión cada vez más deteriorada del fútbol argentino, está más que claro que los partidos no se ganan más con la camiseta. Ni con los nombres. Se lleva los tres puntos el más vivo, no el que más tiene. El que mejor plantea los partidos y sobre todas las cosas, el que más la mete. Tan claro como el agua es el tema. Ahora bien, siempre resulta más fácil poder resaltar las virtudes que los errores. Es cierto, el Grana se cansó de generar situaciones de peligro contra el arco de Conde. Tres en la primera etapa y ¡Doce! en el complemento, contando la única que fue adentro de parte del Chino Romero, quien anteriormente había fallado dos claritas abajo del arco. ¿Alcanza con eso? No. Si de 15 embocas una, el tema pasa a ser delicado ya. Pero sin dudas que es el camino. Será cuestión de ajustar un poco la puntería. Las que no entraron en esta ocasión, deberían hacerlo ante Estudiantes. Pero eso solamente servirá si antes se solucionan otras cuestiones a tener en cuenta. A ver…

MIRÁ LOS GOLES QUE ERRÓ LANÚS

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¿Quién marca de mitad de cancha hacia atrás? ¿Romero y Acosta cómo se vio en varias oportunidades ante Rafaela son la solución? Claro, después es fácil caerle al Pelado Silva. Solo contra el mundo, arreglate como puedas. Otro tema: ¿Cómo le logra un equilibrio en la última línea? Con trabajo. Y mucho. Las dos conquista de la Crema llegan por errores claros en la zaga central (eso, sin contar la de Albertengo en el PT que salvó Marche) que muestra debilidades en varios aspectos. En sus espaldas y desacoples constantes. No trasmiten seguridad, aunque las comparaciones siempre sean odiosas. Nadie duda de su jerarquía, pero los Melli deberán hacer algo para comenzar a protegerlos un poco más. En el primero de Depetris, es el paraguayo Gómez quien primero habilita saliendo tarde y luego no logra despejar. En el segundo, Braghieri intenta rechazar con Albertengo adelante suyo y no solo que no puede hacerlo. Luego, lo pierde, lo deja solito… Y es el propio delantero quien empuja el centro atrás de González para poner el parcial 2 a 0. ¿La vuelta del Pulpo alcanza? ¿En dónde va a jugar Ortiz? No quedan dudas que la banda no es lo suyo. Cuando se tiró al medio en el ST fue de lo mejorcito del equipo – otra vez – y además tuvo chances para marcar.  

A todo esto mencionado, no se puede hacer vista gorda al tema arbitral. Que no suene a excusa, por favor. Ya quedaron atrás los penales mal cobrados contra el Mineiro y ni que hablar con el Kashiwa. Quizá por eso siga doliendo tanto cada vez que no pitan a favor situaciones tan visibles como las de ayer en Rafaela. La mano de Vittor cuando marcaba a Silva o la de Serrano cuando Romero metía el remate desde la derecha existieron. ¿Por qué no las cobran? Tarea para para el hogar.

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