El arquero de Lanús fue protagonista del empate 2-2 frente a Defensa y Justicia en el Tito Tomaghello. Las incidencias de un trámite cambiante, la rareza en el penal de Uvita Fernández y cómo se palpita el clásico del próximo domingo.

Lautaro Morales fue protagonista de principio a fin en Florencio Varela. Para comenzar una noche movida, en la previa del partido recibió una agresión por un proyectil que cayó desde la tribuna popular de Defensa.

«Me vine para el costado del arco y me tiraron una piedra. Si era un piedrazo, seguro me rompía la cabeza (Sic). Por suerte no era tan grande y me lastimó un poco. El árbitro me preguntó si quería jugarlo y le dije que sí, que estaba bien», admitió el arquero de Lanús, más tarde autor de un gol en contra por una jugada poco fortuita.

ASÍ FUE LA AGRESIÓN A MORALES, ARQUERO DE LANÚS, EN LA PREVIA DEL PARTIDO.

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«Estábamos controlando el partido, lo llevábamos bien hasta la desgracia del gol de Uvita (Fernández) que me pega en la espalda y entra. Son cosas que pasan. Pudimos rescatar un punto de una cancha difícil», valoró.

¡DESCUENTA EL HALCÓN! Bombazo de Uvita Fernández y gol en contra de Morales: gana Lanús 2-1 en la #LigaProfesional.

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Sobre la acción tan llamativa del gol anulado al propio Uvita Fernández en el penal que pateó con los dos pies, Morales explicó: «Me di cuenta rápido porque la iba a cruzar y cuando veo que le pega en el otro pie le digo enseguida a Darío (Herrera). Ahí lo llamaron y por suerte lo anularon».

Con tres fechas más por delante en el torneo, al Granate se le viene el más especial de todos el próximo domingo: El Clásico del Sur contra Banfield, a las 19 horas en La Fortaleza. «Hay que estar tranquilos porque lo jugamos con nuestra gente, que siempre está y nos alienta. Esperemos hacer un buen partido y darles una alegría», proyectó.