Lanús hizo historia grande en la Fortaleza. Perdía 2 a 0 a los 23 minutos del primer tiempo y pensar en dar vuelta la historia era algo ilógico. Sin embargo, el equipo apareció en su máximo esplendor y de manera heroica lo terminó ganando 4 a 2 para meterse de lleno en la Final de la Libertadores. José Sand, en dos ocasiones, Lautaro Acosta y Alejandro Silva, los autores de los tantos del conjunto de Jorge Almirón. Gremio o Barcelona, el rival para definir al mejor de América.
Sin dudas, que se trató de una noche mágica. Una noche tenida de Granate. De esas que van a quedar guardadas para siempre en la retina de los hinchas de Lanús. Su equipo hizo un milagro, un verdadero milagro, se lo dio vuelta a River y se metió en la Final de la Copa Libertadores. Perdía 2 a 0 (3 en el resultado general, contando la Ida) en tan solo 23 minutos de juego. Porque River acertó en las dos que tuvo, con el penal de Scocco a los 18 y el cabezazo de Montiel a los 23. Y así, con casi nada, decretaba la serie. Al menos, el 99.9% de cualquier futbolero hubiese pensado eso. Más por cómo se estaban dando las cosas. Lanús sin reacción, con jugadores al borde de la expulsión y hasta con un River muy cerca de ampliar la ventaja. Sin embargo, cuando se terminaba la primera etapa, y un tal José Sand (tras habilitación de Acosta), le pegó con el alma desde un ángulo imposible y le rompió el arco a Lux para al menos ponerle un poco de pimienta a lo que pudiese pasar en el complemente.
A los pocos segundos de la segunda mitad, otra vez el Pepe volvía a dar la nota. Bien de goleador, en el lugar exacto, ponía el 2-2. Faltaba mucho, y también dos goles para que el Granate sigue en competencia. Pero iba a haber más. El correntino la peleó en el córner, Silva hizo lo suyo y Acosta la empujó abajo del arco. 3 a 2, y el sueño parecía cada vez más real. Y se dio nomás, a los 24’ cuando el propio Alejandro Silva de penal puso cifras definitivas. De película, con final feliz. Ahora, entre el Gremio de Brasil y Barcelona de Ecuador saldrá el rival para definir al mejor del continente americano.