Lanús se quedó con las manos vacías en su visita a Santa Fe. Frente a Unión, y luego de estar dos veces arriba en el marcador, terminó perdiendo 3 a 2 por el gol en el descuento del juvenil Juárez. De esta manera, los dirigidos por Luis Zubeldía, que se habían adelantado por Orsini y Sand en cada tiempo, dejaron pasar la chance de quedar como líderes del Grupo 2 junto a Vélez, que ahora manda con puntaje perfecto.
¡Ay Lanús! Qué manera de desperdiciar una chance tan concreta para mirar a todos desde arriba en el tan complicado Grupo 2 de la Copa de la Liga Profesional.
Un partido que parecía controlado, que a pesar de las complicaciones que fueron surgiendo, lo tuvo arriba en el marcador en ¡dos oportunidades! Y que finalmente lo deja con las manos vacías. Sí, como a un niño que le sacan las golosinas de sus manos. Casi sin argumentos, Unión le ganó. Se lo dio vuelta. Y se lo ganó bien, con sus limitaciones, pero sacando fruto de los enormes errores que tuvo el Grana.
De ir dos veces ganando, a perder, algo tuvo que haber pasado… Unión le dio la pelota, lo provocó, lo esperó en su campo y de contra, desde el vamos, siempre tuvo bien en claro cómo iba a lastimar a Lanús: por los costados. A espaldas de sus laterales (sí, una vez más). A lo largo de los 90 minutos, el Tatengue siempre insistió con esta receta. Y como resultado, se llevó tres puntitos. Nada mal, ¿no?
En la primera parte, todo parecía que sería color de rosas. 15 minutos solamente habían transcurrido, y Lanús ya estaba 1 a 0 adelante. Buen centro de Bernabei, cabezazo letal de Orsini -quizá en la única que le llegó clara- y adentro. El Grana estaba bien parado hasta ahí. Pero se dio una situación particular, que se repitió en el complemento.
Cuando Unión estaba peor, lastimó. Sin mucha organización de juego, en la famosa segunda jugada que tanto insisten los técnicos, los santafesinos también sacaron ventaja. A los 35, Galván le fue con todo a Acosta -sin falta, pero sí con fuerza excesiva- ganó y habilitó a Juan Manuel García. El delantero enfrentó a Morales, y con una definición cruzada muy pronunciada, estampó el 1 a 1. Floja reacción del arquero, que tuvo una noche complicada cada vez que le llegaron.
En otro orden, antes del final, Sand tuvo el segundo, pero falló solo abajo del arco ante Moyano uno de esos goles que el Pepe no suele fallar.
Sin embargo, en el complemento, tendría revancha rápidamente. Otra vez desde los doce pasos. A los 4 minutos, sí otra vez rapidito, el correntino ponía el 2 a 1 que nuevamente daba confianza y seguridad. Pero la alegría duró poco. Poquísimo. A los 9, de un pelotazo anunciado a espaldas de Aguirre -¡Otra vez!- Zenón envío un centro pasado al único hombre Tatengue en el área. Sí, otra vez García, que con un cabezazo sencillo dejó parado a Morales (Lautarito…) y puso el 2 a 2. Con escasas armas, Unión se metía en partido de nuevo.
La historia continuó con Lanús insistiendo con mayor esfuerzo con el correr de los minutos, sin muchas ideas, y con Unión a la espera y con sus mismas intenciones. Es decir, a más esfuerzo y desgaste, menos resultado. El Grana siempre pareció estar cerca, pero se quedó en eso. En cambio, Unión, firme atrás, estaba a la expectativa de lo que finalmente iba a suceder.
A los 48, sobre el cierre, con Lanús plantado en campo rival, otro pelotazo, una nueva segunda pelota aprovechada por el local, y final anunciado. El juvenil Juárez, de media distancia, esquinó su derechazo y Morales no logró desviar la pelota en su máxima expresión. Apenas la rozó, y se metió junto al palo. El golpe final, merecido quizá, hundió al Granate que pagó caro su inocencia.
https://youtu.be/3ATt2yBJMz8