Ezequiel Muñoz entrenó diferenciado toda la semana por una molestia en el cuádriceps que arrastra del partido con Estudiantes y mañana lo evaluarán para ver si puede jugar el domingo ante San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro. Si no llega, Guillermo Burdisso ocupará su lugar, en la que sería la única variante.
Lanús mantiene una duda central a 48 horas de la visita a San Lorenzo de Almagro, por la fecha 23 que cerrará la Superliga Argentina de Fútbol.
Para jugar el domingo a las 17:35 en el Nuevo Gasómetro, con arbitraje de Fernando Rapallini, Luis Zubeldía esperará hasta mañana a Ezequiel Muñoz. El zaguero central arrastra una molestia en el cuádriceps que le impidió entrenar con normalidad a lo largo de la semana y su presencia es una gran incógnita.
«Vamos a evaluarlo. Si no está bien, irá Burdisso. Ezequiel me pidió que lo esperara, él y el cuerpo médico están con confianza pero aún no lo vi en cancha», aseguró el entrenador del Grana, quien añadió con respecto al probable equipo: «No creo que haya muchas modificaciones».
De esta manera, y de no mediar ninguna eventualidad, Lanús saldría casi con el mismo once que viene de empatar 1-1 contra Estudiantes. Es decir, con Rossi; Di Plácido, Muñoz o Burdisso, Valenti, Bernabei; Esquivel, Quignón, Moreno; Auzqui, Sand (4 amarillas) y Acosta.
Mañana será el último ensayo antes de la concentración en el hotel Holiday Inn de Ezeiza, con la habitual práctica de pelota parada y movimientos tácticos pensando en el Ciclón. Al término de la misma quedará definida la lista de jugadores convocados y, seguramente, será develada la duda central: ¿Llega Muñoz o lo reemplaza Burdisso?