Monteseirín y Maxi Velázquez, una vez más, lideraron los cinco minutos de furia de Lanús en Avellaneda. Ambos vieron la roja en la goleada 4 a 1 que le propinó Independiente y engrosaron la lista de suspendidos de cara al partido del sábado con Gimnasia. El capitán, que ya había sido expulsado hace cinco días en Victoria, podría perderse las tres fechas que quedan por reincidencia. ¿Se cumplió un ciclo?
La impotencia lo desbordó, perdió los estribos con facilidad. La imagen descontrolada de Lanús en un final caótico ante Independiente se asemejó a la que parecía archivada de las copas internacionales de principio de semestre. Esta vez no fue en Belo Horizonte ni en Kashiwa. La conducta indisciplinada reapareció en Avellaneda y las consecuencias estuvieron a la vista. “Tenemos que aprender que los partidos se ganan o se pierden adentro de la cancha, y que once contra once le ganamos a cualquiera. Con uno o dos menos se hace muy difícil”, soltó Guillermo Barros Schelotto después del partido.
¿Cómo fue la secuencia? A diez minutos para el cierre, el Granate perdía 2-1 contra el Rojo y la pasaba mal, pero igualmente estaba a un gol de rescatar un empate, por demás valioso a esa altura del partido. Sin embargo, la ilusión se esfumó en un abrir y cerrar de ojos. A los 35′, Monteseirín pecó de ingenuo al abandonar su quinta y atender al ingresado Martín Benítez en la mitad de la cancha. Una falta innecesaria que le valió la segunda amarilla y dejó al equipo de Guillermo con uno menos. Casi por efecto dominó, cuatro minutos después siguió sus pasos un compañero de la última línea, que pese a tener unos cuantos partidos más en el lomo imitó la actitud irresponsable del juvenil. Y en su caso, reiterada. Sin intención de disputar el balón, Maxi Velázquez le propinó un codazo inexplicable al propio Benítez y recibió la roja directa por parte de Delfino, como hace cinco días le mostró Echenique en Victoria. Once contra nueve, por decantación llegaron dos goles más de Independiente para liquidar el pleito 4-1 a su favor.
Ambos deberán cumplir la suspensión ante Gimnasia, el sábado a las 21.30 en la Fortaleza, al igual que Lautaro Acosta, quien pagará las cinco amarillas que acumuló contra Tigre cuando vuelvan Gomez y Ayala de la Selección de Paraguay (los dos fueron titulares en el 2-1 a Perú en Luque; hoy sólo juega el defensor en Lima). No obstante, es un hecho que el capitán recibirá una sanción más severa por ser reincidente. Como las dos expulsiones fueron por roja directa, el Tribunal de Disciplina lo podría castigar para las tres fechas que quedan del torneo. Con contrato en el Grana hasta junio de 2015, el mal comportamiento de Velázquez se suma a su bajo nivel futbolístico. Un combo explosivo que parece ponerle un moño al ciclo del jugador con más presencias en la Primera División del club.
Mirá las dos amonestaciones de Monteseirín
Mirá la expulsión de Velázquez
